PRO-CESADO

Macri se encuentra procesado por la Justicia debido a su vinculación con una organización ilícita de espionaje, en pocos días se conocerá si la investigación judicial continúa o si se la apelación tiene un resultado en su favor y es finalmente sobreseído.

A pesar de estar involucrado en un problema legal que lo puede llevar al juicio político y posteriormente a la destitución, al Jefe de Gobierno parece no importarle, continúa con sus giras por Buenos Aires intentando ganar adeptos para sus aspiraciones presidenciales, mantiene una actitud incoherente de culpar de todo a la oposición y promete continuar con el “PROyecto” pidiendo fortaleza a sus fieles pase lo que pase. Pese a su hipócrita y deplorable actitud de indiferencia frente a los hechos, Macri continúa como si nada hubiese sucedido, esta es su última estrategia antes del escándalo, es conveniente para su continuidad esquivar la situación ya que reconocer la verdad lo condenaría inmediatamente, debe confundir al público mostrando fortaleza y abulia de lo contrario se termina todo.

Los amigos de Macri como el diario la nación publican estadísticas en las cuales dicen que el 80% de los procesados en Argentina son sobreseídos casi indicando que la justicia vive equivocándose y a Macri nada le sucederá, pretenden demostrar que es solo un error más de una Juez inútil y funcional a Néstor Kirchner.

Los caminos se cierran, las escuchas ilegales existieron, son punibles, la investigación posiblemente continúe en la Justicia hasta las últimas consecuencias y si el jefe de Gobierno es culpable debe afrontar todos los mecanismos legales para su sanción. De nada le servirá aparentar indiferencia y pedir fortaleza a sus seguidores, tampoco serán de utilidad los saludos de De Narváez, ni la actitud contemplativa e indigna de sus amigos tratándolo de mártir político que debe sufrir la malevolencia Kirchnerista.

Macri es un pseudo proyecto de dirigente político confiado en que la ley es solo algo circunstancial que puede manejarse, hoy le toca atravesar un proceso judicial, en 30 días se conocerá el desenlace, mientras tanto soportaremos las bajezas indignas y los intentos de minimización de este proyecto disfuncional de política argentina llamado PRO.